Yucatán desde el cielo – Donde la playa y los colores bailan
Unos días de descanso en la playa eran imprescindibles, y El Cuyo me atrapó por completo. Un pequeño pueblo pesquero en la costa norte de Yucatán, donde playas largas y vírgenes y el agua turquesa del Caribe, vistas desde el cielo, pintan una escena de absoluta tranquilidad. La arena clara se funde en suaves dunas, el mar acaricia la orilla con calma – un contraste entre lo salvaje y lo sereno que toca el corazón.












Ría Lagartos: Un paraíso natural protegido
Muy cerca se encuentra Ría Lagartos, una reserva natural que desde el aire se convierte en un mosaico vibrante de canales, manglares y lagunas. Aquí la vida late con fuerza – flamencos, cocodrilos y una infinidad de especies habitan este ecosistema, tan áspero como delicado, atrapado en cada mirada.










Las Coloradas: Las salinas rosadas
Más al sur, las salinas de Las Coloradas ofrecen un espectáculo de color que desde las alturas deja sin aliento. Tonos rosados intensos brillan bajo el cielo azul profundo y junto al verde de los manglares – un verdadero baile entre la naturaleza y la luz. Estos colores, nacidos de microorganismos y algas en aguas salinas, hacen de este lugar no solo un centro económico clave, sino también un sueño visual que encierra toda la riqueza de Yucatán.




