Senderismo en el Oeschinensee (Suiza)
Durante el largo fin de semana de la Ascensión, fuimos por primera vez al Oberland bernés, rumbo a Kandersteg y Adelboden, para hacer senderismo en el Oeschinensee – un llamado que nos atrajo, salvaje y prometedor. Poco antes de llegar, el Eiger, Mönch y Jungfrau a la izquierda de la autopista captaron nuestra atención, pero Kandersteg tenía su propia magia preparada.
Una subida entre gente y montañas
El sábado por la mañana empezamos temprano, sorprendidos por la cantidad de gente en la estación del valle. Subimos hasta el lago, hicimos una breve parada entre la multitud, y luego caminamos por la orilla hasta el sendero panorámico. Arriba por fin estaba más tranquilo – la vista del macizo montañoso era a menudo espectacular, un contraste entre bullicio y silencio, áspero y majestuoso.
Nieve, dron y un cierre
El camino aún mostraba campos de nieve y tramos resbaladizos, pero logramos llegar diez minutos antes del último descenso en la estación de montaña. Tiempo suficiente para capturar una toma aérea con el dron para la foto de portada, un baile entre frío y brillo. A la mañana siguiente visitamos las cataratas de Engstligen cerca de Adelboden, antes de regresar tranquilamente al lago de Constanza – un rincón hermoso que quiere volver a vernos.